Casacor 2024: Un diálogo entre arquitectura y diseño interior

por Silvana Cossio
Directora creativa de Arde

Este año, Casacor se llevó a cabo en el Puericultorio Pérez Araníbar, una locación que ya ha sido sede del evento en años anteriores. Casacor es una exhibición de diseño de interiores en la que profesionales de larga trayectoria y nuevos diseñadores tienen la oportunidad de presentar sus propuestas en espacios de edificios con valor arquitectónico. Usualmente, estos edificios están en desuso y, en muchas ocasiones, en abandono. Estas intervenciones los devuelven a la vida, lo que hace que Casacor tenga un carácter especial y sea algo más que una feria de diseño en una locación convencional.

Este año, tuve la oportunidad de asistir a Casacor durante varios días seguidos y, por primera vez, logré visitar todos los espacios. Ha sido un año especial, pues, además del placer de visitar el evento y disfrutarlo, fui invitada a ser parte del jurado del concurso Casacor, el encargado de elegir los mejores espacios en diferentes categorías. He participado como expositora en años anteriores y fue bonito y toda una sorpresa ser parte de Casacor como jurado.

1. Vista del pabellón C en el interior del Puericultorio Pérez Araníbar, locación de la edición 2024 de Casacor.

1.  Vista del pabellón C en el interior del Puericultorio Pérez Araníbar, locación de la edición 2024 de Casacor.

De todos los espacios visitados, hice mi lista de favoritos. Algunas de mis elecciones coincidieron con los ganadores en algunas de las categorías del concurso.

En mi "short list" están: Ruraq Maki de Gianfranco Loli y Viviana Velarde; El Bosque Aparece de Augusta Pastor y Santiago Roose; La Librería de Romo Arquitectos; Inspiración de la Forma de Hiro Arquitectos; la Suite Familiar del Hotel Boutique de Mónica Prialé y Raúl Arróspide; el Hall del Hotel Boutique de Mario Lara Arquitectos; la Cocina con Sentido de Kathy Cárdenas y Caroline Feldman; Experiencia Volvo de Baum Studio y la Biblioteca Naturalista junto con el Jardín de Contemplación de Agave y Ro de Rivero.

2. Interior del espacio “El bosque aparece”, espacio ganador del concurso Casacor.

Todos estos espacios me gustaron por distintas razones. Algunos por la atmósfera general, el concepto y la materialidad, como fue el caso de Ruraq Maki e Inspiración de la Forma; otros, por la artesanía mostrada en la composición del espacio y el valor de las piezas hechas especialmente, como en la Biblioteca Naturalista y el Jardín de Contemplación. En el caso de la Cocina con Sentido, las piezas de cerámica de Vacide Erda Zimic capturaron toda mi atención.

3. Piezas de cerámica, arte de Vacide Erda Zimic en la “Cocina con Sentido”

4. Display metálico en “La librería”

5. Interior del espacio Ruraq Maki y su display con ladrillos de adobe.

El ganador indiscutible ha sido el paisajismo, tanto en los espacios que intencionalmente presentaron una propuesta paisajística como "El Bosque Aparece" (espacio ganador) o "Experiencia Volvo", cuya composición entre paisaje y materialidad fue muy elegante, con los elementos suficientes. Como diría Dieter Rams: “Good design is as little design as possible” (“El buen diseño es el menor diseño posible”). Vi mucha vegetación con plantas nativas en los espacios circundantes a los pabellones y propuestas de decoración con plantas de interior en maravillosas macetas como las de la tienda Gardenia, expuestas en el Hall del Hotel Boutique.

6. Hermosas macetas de arcilla de la tienda Gardenia, en el hall de ingreso del Hotel Boutique

Otro aspecto a resaltar es que más espacios han optado por propuestas sobrias en contraposición a elementos de lujo tradicional (nada en contra). Una exhibición como esta es una oportunidad para mostrar creatividad, no necesariamente una composición de muebles costosos. Vi muchas soluciones ingeniosas, como el sistema de repisas de La Librería con sus perfiles pintados en naranja y el techo con espejo: o los soportes de exhibición de Ruraq Maki hechos con ladrillos de adobe, hermosos y de mucha coherencia conceptual. También llamaron mi atención los muebles hechos a partir de enchapes de Cassinelli en la Suite del Hotel Boutique; y ni qué decir de la Librería Naturalista, que era un derroche de elementos fabricados especialmente para la exhibición, lo que le da un mérito adicional a la propuesta de diseño.

7. Composición de mobiliario artesanal en la “Biblioteca naturalista”.

Este año, el diálogo entre contenedor y contenido ha logrado un equilibrio muy interesante. La apuesta por propuestas más arriesgadas y conceptuales ha resultado en una exhibición que no solo atrae, sino que invita a reflexionar a profesionales, estudiantes y entusiastas del diseño. Casacor continúa siendo un espacio donde la creatividad encuentra un terreno fértil para desarrollarse.

Una galería de fotos a continuación:

Una tarde en Casacor 2022

por Silvana Cossio
Directora creativa de Arde

Acaba de terminar Casacor 2022, una de las exposiciones más importantes sobre diseño de interiores en Lima. Casacor volvió luego de dos años debido a las restricciones del Covid y estuvo abierto al público desde el martes 24 de mayo hasta el domingo 3 de julio de este año. Visitarlo fue una obligación.

Debo advertir que he participado en Casacor en varias oportunidades. La primera vez fue en 2004 en el Cuartel San Martín. Aquella vez participé con dos buenas amigas, con quienes por esos días teníamos una oficina que se llamaba Proyecto Uno. La última vez que participé fue en 2014. Han pasado dieciocho años desde esa primera vez y ocho desde la última, pero volver se sintió como siempre. El Sr. Ibarra me recibió en la entrada y, si bien dudo que recuerde mi nombre, me saludó con un cálido “¡Hola, arquitecta!” que me hizo volver en el tiempo.

Este año Casacor se organizó dentro de cuatro casas contiguas y rodeadas de extensas áreas verdes. No fueron pocos ambientes, alrededor de 40 si no me equivoco, pero el recorrido se hizo corto.

El sábado 28 de mayo por la mañana, mientras tomaba desayuno, conversaba con mi esposo acerca del gran problema de los centros históricos latinoamericanos, y como la situación no ha mejorado desde la Carta de Quito, que allá por el año 1977, reflexionaba y delineaba una hoja de ruta para su recuperación. Por supuesto, con el amor que le tengo a la arquitectura, siempre pensaré en una solución que busque conservar hasta cierto punto la imagen, identidad y estética del edificio original. En oposición, mi marido prefiere la practicidad, y si estos edificios viejos y a punto de colapsar no anteponen la vida, deben ser sustituidos por otros que cumplan dichas funciones. No es que yo no valore la vida humana, pero mi sentido de la historia está fuertemente influido por mi formación como arquitecta. La discusión llegó hasta Eugène Viollet-le-Duc y John Ruskin, cada quien defendiendo su punto.

Con estas ideas en la cabeza llegué ese mismo sábado por la tarde a Casacor, donde cada diseñador toma una postura personal (intencional o no) acerca de cómo intervenir el espacio que ha decidido diseñar. Aquí empieza la fiesta.

¿Qué encontré? La eterna dualidad sobre la intervención en una preexistencia: “conservar o restaurar”. El team Viollet-le-Duc apuesta por poner melamina hasta en los techos, mientras que el team Ruskin opera rescatando elementos y manteniendo pisos originales en la medida de lo posible. Sin ánimos de juzgar a nadie, debo decir que esta vez vi más pisos vinílicos y paneles estriados de PVC que nunca antes. Una verdadera fiesta del revestimiento. Muchos de mis colegas son muy hábiles en las artes de combinar texturas y capas existentes con nuevas formas y colores. Otros (sospecho los más jóvenes) se han dejado seducir por la negación de la arquitectura. En su defensa, creo que la teatralidad es parte del perfil del interiorista: generar atmósferas y transportar a los visitantes a “paisajes lejanos”, o hacerlos “sentir en casa” es de lo que vivimos.

“Cuando pensamos en el espacio, solo miramos sus contenedores, como si el propio espacio fuese invisible. Toda la teoría para la producción de espacio se basa en una preocupación obsesiva por lo opuesto: la masa y los objetos, es decir, la arquitectura. Los arquitectos no pudieron explicar el espacio” (Rem Koolhaas, 2002). Reflexionando al respecto de este texto, pienso que dicho trabajo -el de explicar el espacio- le compete al interiorista. Se podría decir que el trabajo del interiorista es el espacio y su negocio es ofrecer fantasía.

1.      Jardín en el proyecto de Augusta Pastor, Casacor 2022.

Casacor 2022 ha sido un buen Casacor. Los jardines han sido los protagonistas y ganadores indiscutibles. Incluso la vegetación en interiores ha estado espectacular. El jardín del espacio de Augusta Pastor y el de Agave me parecieron los más logrados, con un equilibrio entre lo organizado y lo salvaje que encuentro memorable. Los espacios más sobrios o que, con algunos detalles interesantes, lograron poner en valor la arquitectura de las casas fueron los más conmovedores. Un tema aparte fue el arriesgado diseño de los baños públicos. Un punto a favor para el sentido de aventura del diseñador que decidió hacer esos baños en exteriores y con láminas inteligentes. Desafiar el pudor humano de la mano de la tecnología da para un debate filosófico.

Me hubiese gustado encontrar un poco más de disrupción o locura. Algunos espacios lo tuvieron, sobre todo los paisajísticos. Mi percepción es que este año la preocupación ha recaído en lo estético y mainstream. Es un camino seguro y, de repente, el correcto para los tiempos difíciles que atravesamos.

2. Jardines en exterior, Casacor 2022.

Eventos como Casacor son vitales para echar a andar la maquinaría en nuestro rubro, ver y comentar, competir y mejorar. Pero para mí lo más importante de estos eventos, más allá de ser una vitrina para diseñadores y proveedores, es la gran oportunidad para mantener el contacto entre diseñadores consolidados, jóvenes talentos, proveedores y público en general. Es una hermosa manera de nutrir la idea de comunidad y crear lazos en una industria en crecimiento como la peruana. Larga vida a Casacor.

Imágenes

(1) Jardín en el proyecto de Augusta Pastor, Casacor 2022. Foto propia.

(2) Jardín en exterior, Casacor 2022. Foto propia.

Referencias

Artículo “El espacio basura” (2002), dentro del libro Acerca de la ciudad, Rem Koolhaas, 2014

Ágave
https://www.instagram.com/agave.par/?hl=en

Augusta Pastor
https://www.instagram.com/augustapastor/?hl=en

Casacor Peru
https://casacorperu.com



La cocina del siglo XXI

por Silvana Cossio
Directora creativa de Arde

Hace unas semanas me encargaron rediseñar una cocina. Es una cocina de concepto abierto, muy integrada al área social del departamento donde se encuentra. Es una cocina que se percibe incompleta, pues deja mucho espacio de circulación y, aunque esto puede parecer conveniente, implica un desperdicio de metros cuadrados. Además, le resta operatividad a un espacio que debería funcionar como una máquina.

1. Planta del encargo a remodelar, departamento en Miraflores, Lima Perú, 2022

Una vez hecho este diagnóstico me puse a investigar y me pregunté: ¿es necesario que se respete el triángulo de funcionamiento de la cocina, ese santo grial del diseño de interiores, donde estufa, lavadero y refrigerador están alineados?

Podríamos decir que la cocina moderna la inventó Margarete Schütte-Lihotzky. “The Frankfurt Kitchen”cambió para siempre cómo nos enfrentamos espacial y funcionalmente al hecho de cocinar en casa. En 1926, como parte de un proyecto de vivienda, la arquitecta austríaca implementó una serie de innovaciones en la cocina de estos nuevos departamentos: gabinetes estandarizados, un horno eléctrico, una distribución que optimizaba la secuencia del área de cocción y limpieza y un diseño compacto capaz de encajar perfectamente en los nuevos bloques de departamentos europeos que se construyeron luego de la primera guerra mundial. Recordemos que los “cuartos” de cocina previos a esta innovación, eran privilegio de las familias adineradas que contaban con un staff de servicio especializado. 

2. Planta de la Frankfurt Kitchen según un plano delMuseum of Applied Arts, Vienna

La cocina de la clase trabajadora y la clase media urbana reclamaba un espacio propio dentro de las nuevas unidades de vivienda. En palabras de Sara Archer (City Lab, 2019) “The 20th-century kitchen was a new kind of room designed for a new kind of person”. La cocina del siglo XX era un nuevo tipo de espacio diseñado para un nuevo tipo de persona.

Ya en el siglo XXI y, luego de dos años de pandemia, mucho de lo que teníamos como norma debe repensarse. El uso de la cocina ha cambiado, así como los límites de nuestros espacios domésticos. Mucho se ha escrito al respecto en los últimos años. Incluso desde tiempos prepandémicos podíamos encontrar interesantes especulaciones a cerca de como evolucionaría “vivir en la ciudad”. Recuerdo especialmente la exposición de Mini Living en el Fuorisalone 2018 “Built by All”, donde a través de una serie de instalaciones se exploraba diferentes enfoques sobre el futuro de la vivienda, la vida y el trabajo. Una investigación sobre las formas en que el espacio existente puede reutilizarse para adaptarse a nuevas formas de vida (Mini Living, 2018).

3. Frankfurt Kitchen, por Margarete Schütte-Lihotzky. Reconstrucción del Frankfurt Kitchen en el Museum of Applied Arts, Vienna.

En una reciente nota de David Nash para Elle Decor USA, se presentan siete tendencias para las cocinas en 2022. Y si al principio el artículo parece abordar solo temas estéticos, se profundiza en el cambio de uso que ha sufrido la cocina en lo que va del siglo XXI y, definitivamente, en estos dos últimos años de pandemia. El espacio de la cocina dejó de ser ese lugar aislado donde se resuelven en solitario los problemas alimenticios del hogar. Hoy es más bien un lugar dinámico, abierto, bien equipado, amplio y colorido, que bien puede ostentar su propia personalidad al igual que cualquier otro espacio de la casa.

Las observaciones que hizo Margarete Schütte-Lihotzky sobre los nuevos estilos de vida dieron forma a la cocina Frankfurt y ésta, a su vez, definió la personalidad de los hogares urbanos del siglo XX. 

Casi un siglo después, la pandemia pone en evidencia nuevos estilos de vida, más fluidos, más flexibles, que diluyen los límites entre lo doméstico y lo urbano. La cocina oficialmente ha cambiado en el siglo XXI.

El triángulo de trabajo parece irrelevante si necesitas más espacio para todo un equipo de panadería casera. Cuando tu agenda es otra, una nueva cocina exige mucha luz y de calidad. ¿Quién sabe si hay que grabar el próximo video viral? Se acabaron las cocinas blancas y los electrodomésticos de acero con aspecto industrial. Cuanto más color, texturas, piedras naturales y cerámicos de diseño, mejor.

Electrodomésticos de estilo e islas con mobiliario de diseño se abren hacia el área social de la casa. El siglo XXI es el siglo de la cocina.

Imágenes

(1)   Planta del encargo a remodelar, departamento en Miraflores, Lima Perú, 2022.

(2) Planta de la Frankfurt Kitchen según un plano delMuseum of Applied Arts, Vienna.

(3)  Frankfurt Kitchen, por Margarete Schütte-Lihotzky. Reconstrucción de la Frankfurt Kitchen en el Museum of Applied Arts, Vienna. Foto del MAK – Austrian Museum of Applied Arts, Vienna.

Referencias

Margarete Schütte-Lihotzky invented the modern kitchen

https://archinect.com/news/article/150135578/margarete-sch-tte-lihotzky-invented-the-modern-kitchen

The Frankfurt Kitchen Changed How We Cook—and Live

https://www.bloomberg.com/news/articles/2019-05-08/the-frankfurt-kitchen-changed-how-we-cook-and-live

Top designers and industry insiders share the secret recipe for standout kitchen design in 2022.

https://www.elledecor.com/design-decorate/trends/a38739836/kitchen-trends-2022/

New York’s dirty little secret: The apartment kitchen

https://www.6sqft.com/new-yorks-dirty-little-secret-the-apartment-kitchen/